Realidad Aumentada es un término que puede sonarte algo futurista. Sin embargo, hace referencia a una técnica muy extendida ya, y que está sufriendo una cierta revitalización desde la presentación de las Google Glass, las gafas del gigante de Internet que te permiten interactuar con lo que te rodea viendo una imagen virtual superpuesta a la imagen real que observas. Esa es la idea principal de la realidad aumentada: integrar en una misma imagen gráficos virtuales con una fotografía o imagen en movimiento. Sus usos pueden ir desde soporte publicitario interactivo hasta juegos, pasando por geolocalización de negocios, mapas estelares, planificadores de mobiliario, etc. En este artículo te contaré un poco más sobre esta tecnología que añade nuevas posibilidades a la realidad que te rodea.
¿Cómo funciona?
La realidad aumentada hace uso de diferentes elementos de tu dispositivo móvil, smartphone o tablet, para combinar la realidad con imágenes virtuales que la complementen. Así, por una parte, juega un papel fundamental la cámara del dispositivo, que es la que permite registrar la imagen de fondo (normalmente en forma de vídeo en tiempo real, y en otras ocasiones mediante fotografías), su procesador, y los sensores del mismo. Como la realidad aumentada requiere superponer adecuadamente elementos virtuales a la imagen real, a menudo es necesario escanear y procesar la imagen de fondo, para tomar puntos de referencia que sirvan posteriormente para poder escalar, girar o situar adecuadamente los objetos generados digitalmente. De eso se encarga el procesador, que busca patrones en la imagen que sean fácilmente identificables (por lo que, en esos casos, los fondos homogéneos no suelen ser recomendables, por encontrarse menos puntos claros de referencia sobre los que poder basarse para las operaciones posteriores). En otras ocasiones, sin embargo, no es necesario ese procesamiento, si lo único que se busca es situar un negocio a nuestro alrededor mediante un marcador virtual. De ahí que, dependiendo de la aplicación en concreto, sea necesario el uso del giroscopio, el GPS o la brújula del dispositivo, y que algunos programas sean compatibles con unos dispositivos y no con otros.
Cuando el programa reconoce correctamente la posición en que debe situar el objeto virtual sobre la imagen real (gracias a la brújula, al giroscopio, al GPS…), lo integra en dicha imagen, y permite (a menudo) que puedas desplazarte alrededor suya, ya que conociendo su posición y la posición del propio dispositivo, puede representar el modelo virtual de la forma correcta para que guarde las proporciones adecuadas con el resto de la imagen. A menudo lo que se muestra sobre la imagen real es una figura generada en tres dimensiones, por lo que la aplicación puede dibujarla desde cualquier punto de vista.
¿Para qué se puede usar?
Como dije inicialmente, los usos de la realidad aumentada son muy diversos. Veamos algunos de ellos:
Para jugar
¿Buscas un juego que no te haga aislarte de la realidad, sino jugar a través de ella? Los basados en realidad aumentada son una buena opción. A menudo se trata de títulos en los que debes dar caza a determinados seres que van apareciendo a tu alrededor, girando y moviéndote por la habitación (o por la calle) para ello. Un ejemplo de esto es bqmob, una campaña que desarrolló hace unos meses bq para promocionar algunos de sus productos. A través de ella, los participantes podían ir a determinados puntos de algunas ciudades españolas, y romper unas “burbujas virtuales” que podrían encontrar desde su dispositivo móvil para ganar premios.
Otro ejemplo puede ser el juego DroidShooting, en el que debes dar caza a los androides verdes que te rodean disparando diferentes armas, para atrapar el mayor número de ellos en el tiempo disponible. El problema que suelen presentar estos juegos es que, en ocasiones, no responden todo lo bien que cabría esperar a la sensibilidad de los sensores del dispositivo, y se puede ver cómo la imagen virtual vibra o se desajusta con respecto al entorno real.
Como planificadores de mobiliario y como soporte publicitario
El mundo de la publicidad busca reinventarse continuamente, y la realidad aumentada es una muy buena herramienta para ello. Gracias a aplicaciones como Augment, que en su versión gratuita te permite subir tus propios modelos 3D y representarlos a tu alrededor con tu dispositivo, es posible imaginarse cómo quedaría en tu habitación ese mueble que no sabes si comprar o no (si tienes el modelo 3D del mismo). Además, mediante suscripción, permite que puedas cargar tus propios marcadores personalizados, que son imágenes que la aplicación puede posteriormente reconocer para integrar sobre ellas un modelo 3D determinado. Eso hace que, por ejemplo, pueda asociarse un diseño 3D de la Torre Eiffel a una postal de París, para verla en tres dimensiones sobre la cartulina, o bien asociar el modelo 3D de cualquier producto de consumo a una página de un catálogo, de forma que el comprador se haga una idea mucho más adecuada del aspecto de lo que está comprando. Estas características son muy interesantes de cara a empresas y negocios que, invirtiendo una pequeña cantidad de dinero, pueden hacer un marketing más original y, sobre todo, ofrecer una información mucho más cercana de sus productos.
Para geolocalizar determinados lugares
Ya sean restaurantes, negocios en general, puntos de interés turísticos, etc., la realidad aumentada permite que puedas ubicarlos a tu alrededor para saber en qué dirección debes ir, y a qué distancia tienes cada uno de ellos. En esta línea, dos de las aplicaciones más conocidas son Layar y Wikitude. Layar permite, además de mostrarte los negocios a tu alrededor, interactuar con revistas y publicaciones que utilicen el sistema, para mostrar contenido extendido sobre ellas (más en línea con lo que hace Augment). Por su parte, Wikitude está más centrado en la geolocalización, y permite navegar por más de 100 millones de lugares, realizar búsquedas, agrupar el contenido que te interese en lo que llaman “Worlds”, e incluso jugar a varios juegos mediante realidad aumentada
Como navegador
Para terminar, otro de los usos de la realidad aumentada es la de la navegación. Aunque aún no está tan extendido como los anteriores, lo cierto es que esta técnica permite ver un mapa virtual sobre un escenario real, de forma que llegar a tu destino sea mucho más fácil y cómodo. De momento es algo que ya comienzan a integrar algunos vehículos, proyectando imágenes mediante un HUD (Head-Up Display) que se superponen con lo que hay detrás, para mostrar la ruta hacia un lugar determinado, instrucciones sobre el próximo giro, indicaciones sobre el vehículo que va delante, etc. Sin duda, un uso de la realidad aumentada que podría facilitar (siempre que no distraiga) la conducción en multitud de situaciones.
Aquí tienes algunos usos de la realidad aumentada, aunque hay muchos otros y cada día irás descubriendo nuevas aplicaciones de esta interesante técnica que acerca el mundo real al mundo digital. Como siempre, antes de comprar una aplicación, asegúrate de que sea compatible con tu dispositivo ya que, como indiqué al principio, cada aplicación hace uso de unos sistemas u otros según sus necesidades, y no todos los dispositivos tienen los mismos sensores integrados.
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