El nuevo director del Instituto Tecnológico de Aragón-ITAINNOVA, Ángel Fernández, habla con elEconomista.essobre las líneas de acción que se están llevando a cabo para ayudar a la empresa en su transformación y adaptación a la industria 4.0, además de con compañías, emprendedores y starutps para mejorar sus productos y ventas. Líneas de trabajo a las que se suman otras iniciativas como la formación en industria 4.0 y la creación de spinoffs para obtener retornos de los proyectos de I+D+i que se realizan en el instituto.
Lleva al frente de ITAINNOVA desde finales de septiembre de 2015. Una fecha desde la que Ángel Fernández, tras su paso por AITTIP Centro Tecnológico, ha trabajado en las líneas de acción que seguirá al frente de este instituto tecnológico, reconocido dentro y fuera de Aragón y España por su I+D+i enfocada a las empresas.
Un acompañamiento al tejido empresarial para apoyarle tecnológicamente en la consecución de sus objetivos y para cubrir sus necesidades en el que se seguirán prestando los mismos servicios, aunque ahora se va a incidir también en la industria 4.0, entre otras líneas de actividad con la que ya se están consiguiendo resultados en las empresas. ITAINNOVA trabaja con alrededor de 1.000 compañías de diversos sectores de actividad y con clusteres entre los que figuran todos los aragoneses.
¿Qué objetivos se ha marcado al frente de la dirección de ITAINNOVA?
Los objetivos principalmente son tener más actividad con las empresas desde dos puntos de vista. Uno de ellos es a través de proyectos de desarrollo, investigación e innovación, lo que además implicará más empresas que trabajan con el instituto y, por otro lado, incrementar el nivel de internacionalización a través de programas colaborativos y europeos para lo que estamos incrementando sustancialmente las relaciones con los clusteres.
Al mismo tiempo, no tenemos que olvidar que, como el objetivo del instituto tecnológico es impulsar la innovación en las empresas, hemos tomado como línea estratégica -no solo de ITAINNOVA, sino también del Gobierno de Aragón-, el impulso a la industria 4.0.
A día de hoy, pienso que somos el instrumento fundamental para que la industria 4.0, considerada como la cuarta revolución industrial, sea un éxito en las empresas. Eso implicaría una mayor competitividad de las compañías y, lógicamente, nos daría más oportunidades de que creen más empleo altamente cualificado.
¿Qué líneas de trabajo concretas se van a seguir para alcanzar esos objetivos?
Hay dos grandes grupos. Uno de ellos está relacionado con todo lo que deriva de la industria 4.0. Por un lado, estamos transfiriendo a las empresas soluciones de logística con herramientas TICs, soluciones de Big Data como Moriarty, soluciones de implantación de robótica y creación de nuevas soluciones de robótica colaborativa. Al mismo tiempo, estamos trabajando en modelos de computación en la nube y de modelado multifísica y multiescala de materiales.
Por otro lado, la puesta en valor de nuestros laboratorios como herramientas de I+D también nos permite colaborar, por el prestigio que tenemos, con empresas de todo el mundo con ensayos y caracterización de materiales y productos.
Para poder hacer todo esto, necesitamos tener una mayor proactividad con las empresas, más visitas, nuevos sectores y escucharlas en lo que necesitan para darles la respuesta que les encaje.
¿En qué nuevos sectores podría entrar ITAINNOVA?
Por ejemplo, desde el punto de vista de automoción y transporte, queremos trabajar con ellos en nuevas áreas que hasta ahora no trabajaban con nosotros como es el desarrollo de nuevos materiales y soluciones de TICs, logística y Big Data.
Hasta ahora habíamos venido trabajando con sistemas de seguridad y sistemas de compatibilidad electromagnética, pero analizando lo que tenemos en Aragón, que fundamentalmente son fábricas de producción y con el apoyo del Gobierno aragonés, lo que estamos haciendo es trasladar lo que sabemos hacer en industria 4.0 para que sus fábricas sean más competitivas. Si aseguramos su competitividad, no se deslocalizan y, además, las que están dentro de una multinacional, las ponemos en primera fila. A las que son más pequeñas, les damos soporte para que puedan acceder a proveedores de primer nivel.
También trabajan con la agroindustria, que es uno de los principales sectores de actividad en Aragón.
La agroindustria son fábricas también que tienen sus procesos industriales y las mismas necesidades de materiales, logística, Big Data, productos... Para nosotros es fácil colaborar con ellos. Trabajamos, por ejemplo, desde el punto de vista logístico, con la solución Kajal, que es muy eficiente en cuanto a la predicción de la demanda. A futuro, la conexión con sus clientes y usuarios finales exigirá nuevamente herramientas de TICs y Big Data. Igualmente, estamos trabajando en el sector del papel y cartonaje en el que hay empresas importantes en la comunidad aragonesa.
Por el contacto que mantienen con las empresas, ¿qué necesidades tienen?
A día de hoy, nos están demandando Big Data, en el que estamos respondiendo favorablemente. En segundo lugar, nos piden la mejora de sus capacidades logísticas y, en tercer lugar, mecatrónica y robótica para sus automatizaciones. En cuarto lugar, el modulado, simulación y experimentación de nuevos materiales, que es algo que lo demandan también cada día.
También nos solicitan reuniones para hablar de industria 4.0 porque es un salto tecnológico que muchos no saben darlo. Nos hemos dado cuenta de que prácticamente en el entorno casi nadie y pocos en España están trabajando en ello. Como hemos colaborado en muchos proyectos europeos y hemos realizado importantes esfuerzos de investigación con nuestros fondos propios, tenemos soluciones que ellos saben que necesitan a nivel industrial como innovación o bien para adaptación a través de un proceso de investigación y desarrollo.
Precisamente, otra de las líneas de actividad son los proyectos de investigación. ¿Qué pasos están dando?
Ahora estamos trabajando en I+D+i colaborativa, que nos contratan las empresas, pero también a través del programa Horizonte 2020. En el contexto de que la I+D de futuro tiene que ser más tangible al hablar de industria, creo que tenemos las agendas estratégicas bien trazadas y estamos en plataformas que permiten que sepamos en qué hay que investigar ahora para dentro de cinco o diez años.
Queremos que más empresas aragonesas entren en estos programas para la industria conectada. Con nuestras herramientas TICs y lo que investigamos, cualquier empresa de automoción, aeronáutica, maquinaria y bienes de equipo, por poner algunos ejemplos, tendrá una mejor posición dentro de su sector ya globalizado. La industria conectada también afecta a sus procesos de fabricación y tienen que tener nuevas formas de producir y usos de nuevos materiales y ahí volvemos a la robótica... Además, dentro de Horizonte 2020, están las interfaces hombre-máquina, realidad aumentada, drones...
¿Qué dificultades detectan que tienen las empresas para adaptarse a la industria 4.0?
Es un problema técnico y que se sale de su día a día hasta que sea una realidad. Es una transformación hacia unas condiciones que a día de hoy no existen. Es la transformación digital. Todas las empresas tienen que hacer inversión en I+D+i, sobre todo, en TICs y sus medios productivos también tienen que conectarse de alguna manera a estas nuevas TICs. Pero esto hay que verlo venir y es totalmente estratégico saber el qué y el cuándo. Las empresas ven que aquí les podemos asesorar y que les podemos dar algunas de las herramientas que van a necesitar. Entienden que ya hay esa necesidad, pero no lo viven en primera mano o porque su cliente no se lo exige, entre otros factores, y no lo ven como estratégico.
Por ejemplo, con toda información de Big Data, en una empresa global se pueden establecer las reglas que le permita obtener, como resultado de esos datos, dónde se puede mejorar.
Las empresas tienen que conocer las herramientas que les podemos proporcionar y tienen que desarrollar su "ruta tecnológica", de lo que se tiene que investigar en los próximos años, que tienen que convertirse en "rutas 4.0". Necesitan que alguien como nosotros les diga su "ruta tecnológica" para transformarse hacia la industria 4.0.
También estamos enfocados en procesos de fabricación "smart", que son capaces de aprender y en el futuro se reprogramarán en tiempo real. Por ejemplo, estamos trabajando en cómo hacer que una máquina extraiga información de lo que está haciendo, se meta en un sistema de Big Data, se establezcan causas y modelos para que, con lo que se vaya encontrando más adelante, esa máquina sea capaz de reprogramarse.
¿Están las empresas concienciadas de dar el salto a la industria 4.0?
El Gobierno de Aragón, a través de ITAINNOVA, tiene uno de los pocos centros preparados para llevar este tipo de soluciones a la industria 4.0. Las empresas están inquietas y es un continuo ir y venir a las compañías y que nos pidan soluciones. Hay CEOs que desde un año o dos lo han entendido a la primera y dicen lo quieren en industria 4.0 y nos llaman para trabajar con ellos.
¿La empresa que no dé el paso a la industria 4.0 podrá sobrevivir?
En teoría, no. Pero el mundo da muchas vueltas. A priori, en un mundo global, quien no se "conecte" va a tener muchísimas dificultades.
¿Qué valor añadido aporta ITAINNOVA al trabajo que se está haciendo en industria 4.0? ¿En qué se diferencia de otros agentes?
Somos muy multidisciplinares. Trabajamos los materiales, procesos industriales, logística, TICs, robótica... Tenemos grupos de diez personas para cada tecnología y 20 tecnologías en ebullición de desarrollo. También trabajamos en conectar todas esas tecnologías. Eso es nuestra industria 4.0. Centros como este tan multidisciplinar no los hay.
Nuestro valor añadido también son nuestros programas de capacitación. Lo que hacemos es invertir una cuarta parte de nuestro presupuesto en ir a vanguardia de la investigación. Y también está el factor de éxito de haber sabido ir desarrollando estrategias de TICs con logística, de robótica con logística, de TICs con materiales... y con tecnologías como la computación en la nube, Big Data, multifísica... que son claves para la industria 4.0 y que son las soluciones que luego compran las empresas.
¿Han realizado ya proyectos concretos en Industria 4.0?
Tenemos varios. Por ejemplo, está el proyecto FACTS4WORKERS, que estamos haciendo a través de un proyecto europeo dentro del Horizonte 2020 en el que participamos junto a la pyme aragonesa Thermolypic. El objeto es hacer desaparecer el uso del papel en el desarrollo de sus procesos productivos como medio para incrementar la eficiencia y la productividad, así como para reducir los errores cometidos y mejorar la calidad.
Además, y de acuerdo con el objetivo fundamental de FACTS4WORKERS, este y el resto de los casos de uso del proyecto, pretenden incrementar la satisfacción de los trabajadores reduciendo tareas repetitivas, de escaso valor añadido, utilizando tecnologías wearables (smartphones, smartwatches?) como medio para hacer llegar a los trabajadores la información que necesitan, en el momento y de la manera más adecuada para las tareas y el entorno en el que están trabajando.
ITAINNOVA ha colaborado en la definición de este caso de uso como forma de comenzar a trabajar en la consecución de sus objetivos en el proyecto. Por una parte, se está colaborando en la identificación de las tecnologías wearables más adecuadas para permitir a los trabajadores interaccionar con los sistemas de información que soportan los distintos procesos productivos en los que participan. A partir de este análisis de las tecnologías disponibles durante el desarrollo del proyecto, ITAINNOVA colaborará en la identificación, definición y desarrollo de los building blocks que implementarán la interacción de los trabajadores con los sistemas que son necesarios para llevar a cabo los casos de uso.
Por otra parte, y como objetivo más importante, ITAINNOVA liderará el desarrollo de una metodología y un conjunto de herramientas que permita evaluar la satisfacción de los trabajadores con su trabajo, las herramientas que FACTS4WORKERS va a proveer, la información que les es facilitada...
El objetivo es ir más allá del uso de encuestas, entre otras cosas, porque estas ofrecen "fotos fijas" realizadas en un momento dado. Para hacerlo se van a evaluar la posibilidades de obtención, en tiempo real, de datos biométricos y biomecánicos que ofrecen muchos de los dispositivos smart actuales y explorar la posibilidad de utilizar estas y otras tecnologías para evaluar la satisfacción.
También se pretende tener vías alternativas para medir la satisfacción que permitan realizar un seguimiento longitudinal de sus niveles, así como verificar las distintas hipótesis establecidas.
Además, y como segundo gran objetivo del proyecto, la metodología pretende medir el incremento en la productividad que se produce como consecuencia del alto grado de satisfacción de los trabajadores.
¿Mantendrá ITAINNOVA el resto de programas y servicios para las empresas además de trabajar en la Industria 4.0?
Siguen todos. Además, los temas de formación se están potenciando y vamos a sacar programas para la industria 4.0, aunque continuaremos también con otros temas para seguir siendo potentes en otros sectores.
¿Se trabajará con startups y emprendedores?
Tenemos el programa Innoidea, pero el paso más importante es coordinarnos con todos los agentes aragoneses para sumar sinergias. Vamos a ayudar a las empresas de tipo startups en el ámbito tecnológico a que den un salto importante, mejorando su producto y que sea más vendible.
Tenemos también nuestra propia idea de crear spinoffs que exploten nuestros resultados. El programa Proactivo pretende que de los resultados de los proyectos se puedan generar activos o productos que se puedan vender. Si miramos atrás 20 años, vemos que ya hemos hecho spinoffs, aunque no hemos puesto nuestro nombre. Ya tenemos productos en negociación con terceros. Con un solo activo bueno, se podría generar mucho empleo y unos retornos importantes.
¿Con toda esta actividad van a necesitar más recursos?
A día de hoy, la senda de crecimiento que ya se empieza a ver permitirá crear más empleo y también de forma indirecta a través de las spinoffs.
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